Una guía práctica (y honesta) para comenzar a crear contenido profesional.

A ver, ¿para qué quieres estar en LinkedIn?

Antes de pensar en qué vas a publicar, hay una pregunta clave que debes responderte: ¿qué objetivo quieres lograr con tu presencia en LinkedIn?

¿Buscas posicionar tu marca personal? ¿Visibilizar tu empresa o emprendimiento? ¿Conectar con nuevos clientes? ¿Buscar trabajo? Tener claro el propósito te ayudará a definir no solo el tipo de contenido, sino también el tono, el enfoque y hasta los formatos.

Con el objetivo en la mira, el siguiente paso es afinar tu perfil. Un banner bien pensado, una foto profesional (sí, ese pequeño círculo puede hacer una gran diferencia), un titular claro y un resumen estratégico pueden ayudarte a multiplicar tu visibilidad. Y sobre todo, escribe como si hablaras con una sola persona: tu cliente ideal, tu jefe ideal o esa empresa con la que sueñas colaborar.

¿Necesitas diseño para empezar a publicar?

Depende. Si tienes tiempo y algo de habilidad con herramientas básicas, puedes comenzar usando plantillas de Canva o Adobe Express. No necesitas algo perfecto, solo que se entienda y se vea ordenado.

¿Quieres un look más profesional y coherente? Puedes trabajar con un diseñador o una agencia (como nosotros). La clave está en pedir una línea gráfica clara, con plantillas que tú mismo puedas actualizar. Eso te ahorrará tiempo y mantendrá tu estilo en cada publicación.

¿No tienes ni tiempo ni presupuesto? Publica igual. El contenido en texto simple, acompañado de fotos o videos sinceros, muchas veces tiene más impacto que un post ultra diseñado. Incluso puedes ponerte creativo y subir contenido hecho a mano. Literal: papel, plumones, foto y listo.

¿Y qué publicar exactamente?

Si estás bloqueado o no sabes por dónde empezar, aquí algunas ideas que funcionan:

  • Muestra lo que haces, lo que sabes y lo que has logrado.
  • Comparte tu experiencia profesional (sí, también tus errores y aprendizajes).
  • Habla del problema que resuelves o del valor que aportas.
  • Cuenta anécdotas. Humaniza tu historia.
  • Comparte casos de éxito.
  • Publica actualizaciones relevantes de tu empresa.
  • Comparte contenido educativo o inspirador de tu industria.

Y no te olvides de variar los formatos:

Carruseles, PDFs, videos, texto simple, fotos del equipo o incluso un buen selfie corporativo pueden ayudarte a conectar con más personas.

Entérate de las últimas novedades del mundo B2B

Suscríbete a nuestro newsletter

¿Cuándo y cómo publicar?

El mejor horario no es universal, pero en nuestra experiencia con clientes B2B, los mejores días van de lunes a jueves, entre las 8 a. m. y las 11 a. m., o en la tarde a las 4 p. m. Pero hay una regla más importante que el reloj: publica cuando tengas tiempo de responder comentarios. El algoritmo premia la interacción.

¿Y los fines de semana? Aunque hay menos personas conectadas, también hay menos competencia. Podrías llegar justo a ese tomador de decisión con un solo scroll.

Tips Phenomenales

  • Sé directo. Piensa que tu lector tiene el celular en una mano y el café en la otra.
  • Usa storytelling, pero con estructura.
  • Acompaña tus publicaciones con al menos 4 hashtags estratégicos.
  • No te vuelvas técnico: si vas a usar jerga, explícalo.
  • Crea un calendario mensual de publicaciones (puedes usar Notion, Excel, Trello, lo que prefieras).
  • Usa AI para mejorar redacción, pero tu visión y experiencia siempre deben ser tuyas.
  • Mira lo que hacen otras marcas personales: no para copiar, sino para entender qué ya fue probado y qué podrías adaptar.
  • Las fotos con personas funcionan. Siempre.

Ah, y sé coherente, no perfecto

LinkedIn no es solo una red de profesionales, también es un espacio donde buscamos conectar. Mostrar tu experiencia, sí. Pero también tu punto de vista, tu forma de ver las cosas.

No tengas miedo de comenzar. El mejor contenido es el que publicas, no el que dejas guardado en borradores.